Primero, comenzamos a ver fotos de granos de café y comparamos lo que serían los más finos y cuáles serían los más cholos. De repente alguien preguntó: “hay café” y hubo decepción por saber que se acabaron la última gota de la máquina, lo que llegó a cansancio y a preguntar cuál es el café más fino del mundo. Llegamos a la sorpresa de que viene de las heces de un adorable animalito en Indonesia: la civeta.
El café más caro del mundo, Kopi Luwak, no tiene un origen verdaderamente agradable, y para ser sincero, es asqueroso. Primero, la civeta escoge los mejores granos de café y se los come, luego pasan por su tracto intestinal, y son expulsados en sus heces. La razón por la cual es necesario este proceso es porque expulsan el grano parcialmente digerido, pero fermentado, lo que le da un sabor especial. Se recoge manualmente las heces, se las selecciona y se limpian cuidadosamente; luego se tuestan como cualquier otro grano de café.
Cada kilo en el exterior puede llegar a costar unos 200 euros el kilo, y en Estados Unidos puede llegar a costar hasta 700 dólares el kilo. Es tan codiciado por algunas personas que están dispuestas a pagar de más por el café.
La popularidad de este café viene de la película Bucket List con Jack Nicholson y Morgan Freeman, donde el personaje que interpreta Nicholson es un excéntrico millonario que le encanta este tipo de café, pero no conocía su procedencia y Freeman se muere de risa cuando le cuenta.
Y luego de un exhaustivo análisis y reflexión, nos hemos dado cuenta que el negocio del momento es hacer café orgánico en lugar de dar noticias. ¡Crearemos nuestra propia marca de café! Pero su procedencia será secreta… no hagan preguntas.
